Ejemplo de demostración para el curso bíblico de semana del 24 al 30 de Julio de Seamos Mejores Maestros de 2023.
CURSO BÍBLICO – 5 MIN
LECCIÓN Nº 11: Hablar con entusiasmo.
A – Perfecto Ismael, vamos a ir profundizando aún más en este útil tema sobre cómo sacarle máximo provecho a la Biblia. Leer la Biblia es emocionante, aunque puede ser que algunas partes te puedan parecer muy densas por muchos motivos, como podría ser, que es difícil de entender. Pero tenemos que hacer de nuestra lectura un aspecto interesante, y veremos qué ideas podemos aplicar para sacarle el máximo provecho al estudio de la Biblia.
B – Todo cierto Alberto, hay pasajes bíblicos que me gustan mucho, otros que no entiendo tanto y otros, que perdona, pero se me hacen pesado, pero por lo que has dicho, es como muy denso y mucha teoría, o nombres extraños o enseñanzas que no comprendo bien o no sé aplicar en la vida…
A – Mira la imagen del chico, ¿qué podemos observar aquí? Fíjate que el plato de comida siempre es el mismo, tiene los mismos alimentos… ¿qué es lo que cambia?
B – Pues el chico es el mismo, pero va creciendo, y empieza a comer ese plato que cuando era niño no le gustaba…
A – Exactamente, no le gustaba cuando era niño, pero siendo adolescente tampoco mucho, ¿viste el vaso de agua? No lo tiene ahí en la mano porque tenga sed, de hecho, lo agarra justo cuando intenta meterse en la boca aquello que no le gusta por si necesita agua para comérselo…
B – Ahh pues si, no me había dado cuenta, había visto el vaso de agua, pero no había pensado en eso…
A – Dos cosas sobre esta ilustración… la primera, si desde pequeño no te gusta, ¿por qué no lo deja para siempre? Porque sabe que necesita ese alimento para su salud. Y segundo aspecto, a medida que crece, científicamente y por normal general, está demostrado que nuestro gusto va cambiando y vamos aceptando ciertas comidas que de pequeño nuestro paladar no soportaba… ¿en qué se asemeja estos dos aspectos a tu estudio de la Biblia?
B – Qué buena comparación, creo que lo sé, sé por donde vas… pues porque necesitamos estudiar la Biblia para acercarnos a Dios y tener su favor, aunque haya días que quizás nos gustaría hacer otras cosas que nos enseña este sistema y el segundo… lo estoy viendo yo mismo, al principio me costaba entender más ciertas cosas, y a medida que aprendo más y más, voy relacionando cosas y las entiendo mejor…
A – Perfecto Ismael, no tengo mucho más que añadir, a medida que vayas avanzando en el estudio de la Biblia, irás tomando un alimento más sólido, verdades bíblicas más profundas porque estarás listo para entenderlas… es todo un proceso de estudio constante, porque sabemos que lo necesitamos… vamos a ver el punto 4…
B – Te confieso que al principio no me fui fácil… contigo sí, cuando leemos textos y tal… pero cuando me dijiste y tuve que empezar a leerla yo solo en mi casa a veces no sabía ni lo que leía…
A – Este punto nº4 de aprender a disfrutar de la lectura de la Biblia no está aquí por casualidad, sino porque a muchas personas al principio les cuesta… y lo podemos comprar como la comida de la que hablamos… ¿a que luego muchas veces o a tus hijos les has dicho que no sabes lo que se están perdiendo?
B – Sí, pues así mismo ocurre con la Biblia… aunque como te digo, hay pasajes que se me hacen difíciles de comprender…
A – Te voy a leer 1 Pedro 2:2… allí dice: “Como recién nacidos, desarrollen un fuerte deseo por la leche no adulterada de la palabra, para que gracias a ella crezcan hacia la salvación”. ¿Tú madre te daba de comer potajes?
B – Sí, muchos, casi todos los días.
A – ¿Y te gustaban?
B – Solo uno, y porque me obligaba.
A – ¿Y ahora sigues comiendo potajes?
B – Sí, ahora me los hago yo mismo.
A – Si no hubieras comido tantos potajes de pequeños, ¿tendrías la misma forma física y salud de ahora?
B – Posiblemente no, vamos, seguro. Quizás tampoco estaría mal, pero no estaría así.
A – ¿Crees, como dice aquí, que leer la Biblia todos los días puede tener el mismo efecto?
B – Sí, de eso si estoy convencido.
A – Vamos a ver el vídeo sobre qué hicieron algunos jóvenes para que les gustara leer la Biblia y no le supusiera un problema… (…) … Muy bien, vamos a responder la primera pregunta… ¿qué me dices?
B – La verdad que los jóvenes lo tienen difícil con todas las distracciones actuales, pero oraron a Jehová y les ayudó, yo también puedo hacerlo.
A – Claro, como hemos visto en el capítulo 9, la oración te acerca a Dios y te ayuda Ismael. Muy bien, la segunda pregunta, que la has respondido en parte…
B – Sí, pues no solo oraron a Dios, sino que planificaron su vida y dedicaron momentos concretos que les permitiera leer la Biblia…
A – ¿Ya tienes tu momento del día, Ismael? Lo tenemos que buscar, muy bien, y Dios nos ayudará a encontrarlo. ¿Y qué hicieron los jóvenes para que fuera interesante la lectura?
B – Pues una de las chicas incluso combinó su afición de los dibujos con los pasajes bíblicos…
A – ¿Qué bonito no? ¿Te gustaría ver ese dibujo de la armadura? Tú puedes hacer tus propios dibujos, comenzando, por ejemplo, como vimos, por la parte de la Biblia que más te llama la atención… “Prepárese para cada clase bíblica, punto número 5…
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