BUSQUEMOS PERLAS ESCONDIDAS: 1 Samuel 3-5.

Recordemos hermanos y hermanas, una buena práctica a tener en cuenta con las perlas escondidas para el beneficio de toda la congregación. Y es que los comentarios no superen los 30 segundos de extensión. De esta forma, daremos la oportunidad a muchos más hermanos de comentar sus perlas que con tanto trabajo se han preparado.

¿Por qué sabemos que Samuel no dormía en el Santísimo?

“La lámpara de Dios todavía no había sido apagada, y Samuel estaba acostado en el templo de Jehová, donde se encontraba el Arca de Dios.” – 1 Samuel 3:3.

RESPUESTA:

Porque Samuel era un levita de la familia no sacerdotal de los qohatitas y es por eso que no podía acceder a ver las cosas santas. Sino que sería el patio la única zona del tabernáculo a la que tenía acceso, y donde posiblemente, junto con Elí, durmiera.

¿Qué perlas espirituales ha encontrado sobre Jehová, el ministerio y otros temas en la lectura bíblica de esta semana?

1) 1 Samuel 3:13. Este versículo nos enseña que como padres también debemos reprender a nuestros hijos por las cosas que hacen mal. Si no lo hacemos, o lo hacemos mal o tarde, seguirán haciendo esto que está mal y puede que llegue un momento en el que no haya vuelta atrás e incluso se alejen de Dios por no ser reprendidos y enseñados a tiempo.

2) 1 Samuel 3:15-17. Samuel, un joven de 12 años tenía miedo de decirle a su Señor Elí el duro mensaje de condena de Jehová. Pero el miedo no le impidió ser obediente a la Ley y respetar a los mayores. La vida hará que muchas veces tengamos miedo de muchas cosas, pero este no nos debe impedir cumplir siempre con las justas leyes divinas.

3) 1 Samuel 3:19. Samuel a medida que fue creciendo al lado de Dios fue viendo como se cumplía su palabra. De igual forma, si a nuestros hijos les enseñamos cada vez más de Dios a medida que van creciendo, verán su mano y tendrán sólidos fundamentos en su mente y corazón para luchar contra las doctrinas y costumbres de este sistema.

4) 1 Samuel 4:3. Los israelitas se llevaron el arca del pacto al campo de batalla y aún así perdieron. Esto es porque no confiaron en Dios y hacían cosas detestables a él, y solo se acordaban de Jehová cuando lo necesitaban. Esto nos enseña, que Jehová nos ayuda si lo buscamos, si confiamos en él y si construimos cada día una relación aún más estrecha con nuestro Padre celestial.

5) 1 Samuel 5:6. El arca del pacto tenía que estar en su lugar natural, y no junto a otros dioses falsos. Así lo vieron los filisteos con los castigos de la mano de Dios. Esto nos enseña la pureza de Jehová, de su Obra y de su santa palabra por la que nos distingue del mundo. Jehová quiere de nosotros adoración pura y exclusiva, y hemos de alejarnos de todo lo que la pueda poner en riesgo.